Hay que aprender a mirar más hallá del espejo, hay que aprender a abrasar y a comprender, a perdonar y dar una oportunidad, todos nos merecemos una nueva chance, una vuelta de tuerca más, todos algún día la vamos a necesitar y si nosotros la dimos, seremos merecedores de recibirla, por que todo en la vida vuelve. Es dificíl aprender a jugar en la vida y pocas veces la suerte va a sonreirnos y vamos a poder ganar la partida, es difícil pero lo imposible no existe, solo es un poco más duro de conseguir, los errores en todo momento van a formar parte de nuestro camino, es que así se juega, apostamos, perdemos, caemos, nos levantamos y volvemos a apostar hasta ganar, ese es el verdadero sentido de la vida, caer y volverse a levantar, animarse a volver a intentar y poder ser felíz, y los errores son, una forma de aprender